En los últimos años se ha vuelto más frecuente
escuchar que personas de todas las edades deciden quitarse la vida dejando ver
que estamos en una sociedad desligada del sentir de las emociones tan solo
vivimos en una realidad de mentiras que nos toca andar con una máscara puesta
que refleja una sonrisa de mientras cuando por dentro estamos tan destruidos
que nos caemos a pedazos y durante noches enteras lloramos antes de dormir tratando de buscar
una explicación al porque de lo que estamos pasando, ahora bien todo esto es
difícil pasarlo en compañía te llegas a imaginar sufrirlo solo sin tener quien
te ayude, te dé un abrazo, te diga no estás solo, te ayudo a superar ven vamos
a caminar junto por el contrario lo que encontramos es un regaño o te juzgan haciéndonos
sentirnos aún peor impidiendo volver a expresar lo que se sienta ocasionado que
suprimamos nuestros sentimientos
convirtiéndolos en una bomba de tiempo que termina en una decisión lamentable.
Por
consiguiente podemos decir que es un problema no solo de la persona que tomó la
decisión sino de todos de tomar nuestros errores para convertirlos en una
fortaleza demostrando ese apoyo esa atención de dedicarle un minuto a tener una
conversación más allá de si está bien o mal de conocer en realidad lo que
siente porque en estos caso es donde nos damos cuenta que no conocemos ni un
poco a ese familiar, amigo o conocido que tomó la decisión, ahora es momento de
cambiar todo junto para que esa personas
sea mucho más fuerte, incluso podemos
ser afortunado tenerla con vida después de lo sucedido pero otras familias que
si lo perdieron les toca vivir con el porque lo hizo, entonces es momento de dejar
esos malos hábitos de reganar y juzgar sin antes preguntar de volver costumbre un abrazo, un te quiero, un te amo puede ser
algo muy insignificantes pero que puede cambiar una vida y una decisión se tu
padre, madre, hermano, amigo, primo el que empiece a cambiar la vida de todas esa persona eliminado esa falsa idea
de que expresa lo que en realidad siente
es débil.
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